Independiente del Valle es el auténtico ‘Tornado de Sudamérica’. El equipo negriazul derrotó sin incomodarse al Melgar de Perú por 3-0 (6-0 en el global) y aterrizó en su tercera final continental, la segunda por la Copa Sudamericana.
Son seis años los que separan al conjunto ‘rayado’ de aquel encuentro por la final de la Copa Libertadores 2016 contra Atlético Nacional y tres desde su primera copa, cuando derrotó en la final de la Copa Sudamericana 2019 al Colón de Santa Fe.
Lo que a clubes exitosos como Liga de Quito o Barcelona SC les tomó años de gestión y desarrollo, a Independiente del Valle solo le costó 12 años en la Serie A con un modelo de excelencia deportiva, solvencia financiera y desarrollo de talentos.
El club es la cantera de Sudamérica con un programa de alto rendimiento, que no solo aporta para las gestas internacionales, sino para la Selección ecuatoriana y sus procesos exitosos en la Copa Mundial Sub 20 de Polonia 2019 y la clasificación a la Copa Mundial de Catar 2022.
Hoy, talentos de sus divisiones inferiores como Moisés Caicedo, Piero Hincapié, Gonzalo Plata o Jhegson Méndez triunfan gracias a un modelo de gestión que calibra potencial deportivo con desarrollo humano y académico.
¿Y el partido? La serie contra Melgar pareció un trámite para Independiente. El club ecuatoriano derrotó 3-0 en Quito hace una semana y le endosó otros tres goles al equipo peruano, que pareció llegar a estas instancias más por suerte que por méritos.
Independiente hizo su casa en los 2300 msnm de Arequipa y pese a la incomodidad que le generó Melgar en los primeros minutos, los negriazules liquidaron la serie a los 28 minutos, cuando Sornoza, con habilidad de un ‘crack europeo’ bajó un balón, arrastró la marca y le sirvió la pelota a Lautaro Díaz para que definiera el primer tanto, en el mano a mano con Carlos Cáceda.
Fuente. El telégrafo
